jueves, 4 de noviembre de 2010

Cada día...


Cuando alguien te pregunta si darías la vida por la persona que quieres... y respondes sin apenas pensarlo un si. Te das cuenta de que ya no es que quieras, si no que amas, y amas por encima de todo...y entonces solo entonces vuelves el tiempo atrás, y te das cuenta de que ni olvidaste todo ni olvidarás jamás.Que por mucho que te digan pasa página, a qué esperas,olvidalo... por mil consejos que te den, sabes a ciencia cierta de que no es algo que puedas decidir tu, porque nadie manda en su corazón.Y entonces respondes que crees que si pudiera hacerlo, no lo hubiera echo ya? o piensas que sigo queriéndolo porque no tengo otra cosa mejor que hacer? La gente te mira, y entonces son capaces de apreciar, que ya no es que quieras, ni que ames, si no que estas enamorada.

Y como, como quieres que lo olvide? Si no hay un día en que no escuche su nombre, y sientas como algo se rompe dentro de ti. Como se pasa página si no hay noche en la que no despiertes con el corazón agitado tras haber tenido esa pesadilla, esa que siempre es la misma, en la que lo ves marcharse.Y entonces un día escucho ese ruido, el que tanto odio, un crujir de dedos, y sin saber porque lo recuerdas, porque sabes que el lo hacia para hacerte rabiar, y entonces eres capaz de recordar su crujir de dedos, que no era otro cualquiera, era de el.Y te vuelves hacer la misma pregunta, como lo voy a olvidar? si esta en todos lados. Paseas por la calle, por esa calle que un día cruzamos juntos de la mano, y llegas a ese parque ves la gente, lo ves, y sin poder evitarlo lo vuelves a recordar, como en esos días estabais juntos en ese parque.Y poco a poco vuelves a recordar todas y cada una de las cosas, y sientes que lo necesitas, que si no habláis pronto reventarás.

Qué haces eh? dime qué haces?... Pues lo dejas todo, te encierras en ti misma, y te juras que jamás volverás a querer a nadie. Te dedicas a dejar que los momentos pasen, que los días y los meses desaparezcan, esperas... pero esperar el qué? Te das por vencida, admites que te gano la partida... lo dejas pasar todo, hay días que ni si quieras sabes en que lugar te encuentras, llega la noche y ya no haces el esfuerzo de no pensarlo, porque ya todo da igual, lo recuerdas, revives cada noche, todo, de principio a fin, y lloras... y te enfadas con el mundo, y te preguntas por qué a mi?
Intentas buscar algo malo, y ves que no puedes reprocharle nada, no encuentras motivos para odiarlo.

Y entre promesas,palabras y sueños la vida se me va...te das cuenta de que ya no hay regreso, no hay marcha atrás, nada podrá cambiar...Y piensas que te basta con lo que pudiste probar,beso a beso,y los demás palabras, tan solo palabras.Que en lo poco esta lo mucho, y en el principio el final.
Siempre estaré, pero tu te debiste marchar.
No quiero vivir de lo que pudo ser, y necesito dejar de ser amiga de mi soledad.
Ahora tan solo necesito, lograrte olvidar.

1 comentario:

  1. llegue por esas casualidades de la vida a tu blog y lei esta entrada, tan cierta, tan profunda, tan linda me ha encantado muchisimo. me senti identificada.

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