miércoles, 13 de febrero de 2013

Amor, amor, amor...

¿Enamorarse? ¿Amor? ¿Sabemos lo que significa? Nos pasamos día sí y día también hablando de qué es el amor, de lo mucho o lo poco que llegamos a sentirlo, presumimos de estar enamorados... Incluso he escuchado a gente decir que se ha enamorado más de una vez en su vida ¿en serio? Y no solo eso, si no que se atreven a compararlos.

Me entra la risa, no lo puedo evitar. A todas aquellas personas que dicen haberse enamorado muchísimas veces en su vida les digo: ¡¡NO OS HABÉIS ENAMORADO NUNCA!! A no ser que te hayas enamorado de ti mismo. Quien verdaderamente sabe el significado de esa palabra no se atrevería a usarla con tanta certeza.

Enamorarse no es solo saber que quieres a una persona, sino entender que quieres compartir el resto de tu vida con ella. Y ya no solo compartir tu vida sino aprender a aceptar la vida de quién te acompaña. El amor no es solo reír, sino llorar también. El sentimiento del amor es todo lo contrario al del afecto. Para mi son totalmente contrapuestos, son enemigos, son antagónicos. Es todo lo que muchos en ciertas ocasiones confundimos. No os engañéis alguien que siente afecto, no te quiere, si no te aprecia.

Es por tantas veces que escuchamos hablar del amor que está perdiendo valor, la gente ya no saber amar... la gente solo aprecia. Seamos realistas estamos tan ocupados en nosotros míos que en ocasiones se nos olvida quien está a nuestro alrededor. Hay mundo más allá de nuestras narices, y muchísima gente no lo sabe.

Deshojando margaritas entre un ``me quiere y no me quiere´´  me pregunto si lo mio será amor de verdad... Entonces mi cerebro empieza a funcionar. Pienso en él e instantáneamente sonrío, así sin más. Daría la vida por el, lo sé a ciencia cierta. Y no me da miedo, no me da miedo decirlo, no me da miedo que nos equivoquemos, no me da miedo que en ocasiones algo no funcione. Sé que somos fuertes. Por eso sé que si es amor, porque no solo me acompaña en los momentos felices sino que cada vez que lloro me seca las lagrimas.

El amor no es solo pensar en el presente, es no quitar la vista del pasado y no dejar de planear un futuro, juntos claro. Es un tren que pasa a todo velocidad y si no te andas con ojo puede que pare en otra estación. Es encontrar a alguien que soporte tus cambios de humor, a alguien que consiga hacerte llorar de alegría, es ser capaz de hacerte con el corazón de alguien que no te conoce de nada. Es aceptar de donde proviene y hacia donde quiere ir. Y además es aprender a soñar despierto.

Amanecer acurrucado en su pecho, sintiéndote la más afortunada del mundo capaz de mover cielo y tierra. Toda una diosa cada vez que te dice lo mucho que te quiere y una completa guerrera cada vez que superais una nueva batalla de amor. Y saber que después de todo te meterás en la cama y estará ahí para abrazarte y dispuesto a darte las buenas noches. Eso es amor, y pocas veces encontramos a personas compatibles capaz de entregarse hasta ese punto sin miedo a perder.

Como yo sé que no es algo que se encuentre todos los días, que no todos los amores son verdaderos, y que los que lo son no siempre duran para toda la vida. Como lo sé he aprendido a disfrutarlo indiferentemente de  lo que pueda pasar mañana, he aprendido a decir te quiero aunque esté enfadada.

He aprendido amar con los oídos cerrados para no escuchar lo que los demás llegan a decir, me he embadurnado de grasa para que todo me resbale  porque no quiero saber de aquellos que van en contra de quienes se aman simplemente porque no saben el verdadero significado de esa palabra.

Soy feliz, y el amor es lo único que me sostienes día a día con un poco de alegría. Ama con el corazón abierto y te amaran con los ojos cerrados.

No hay comentarios:

Publicar un comentario